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Siempre has escuchado hablar de que hay que hacer una dieta equilibrada, pero seguro que nunca te han dicho en qué consiste una dieta equilibrada. ¿Qué es una dieta equilibrada? Básicamente la mejor alimentación, no es más que aquella que proporciona todos los nutrientes que necesita una persona, sin exceder la ingesta diaria recomendada de calorías (vamos, sin pasarte comiendo).
En resumido, consiste en que debemos comer de todo pero en su justa medida. Una dieta equilibrada incluye alimentos de todos los grupos (verduras y frutas, cereales, proteínas, lácteos, huevos, carne, etc) y satisface todas las necesidades nutricionales de una persona.
Llevar una dieta equilibrada te ayuda a mantener una buena salud y a reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares, diabetes, obesidad, etc.
Decirlo así parece muy sencillo, pero ¿cómo puedes organizar una dieta equilibrada? En este artículo te damos una serie de pautas para hacerlo.
Cómo hacer una dieta equilibrada
Según la OMS, llevar una dieta sana y equilibrada nos ayuda a prevenir enfermedades cardiovasculares y el riesgo de tener diabetes.
Las «dietas milagro» no existen y son dañinas para la salud, ya que causan déficits de nutrientes esenciales. Te recomendamos que empieces a tener un estilo de vida saludable y aportes todos los nutrientes que tu organismo necesita para funcionar.
Primero, te damos unas pautas generales de una dieta equilibrada:
Variedad de alimentos y proporción adecuada de cada alimento
Hemos dicho que hay que comer de todo, básicamente porque ningún alimento contiene los nutrientes por sí mismo. Comer al día alimentos de todos los grupos, y cada uno en la ración correcta (verduras dos veces al día, huevos tres veces a la semana, etc).
Comer 5 veces al día
Es mejor comer en cantidades pequeñas, pero hacerlo las cinco veces al día (desayuno, almuerzo-aperitivo, comida, merienda y cena). Redistribuye tu dieta en 5 comidas y sí también distribuyes tu energía, será mejor que pegarse un atracón a la hora de comer o cenar.
Beber buena cantidad de líquido
La hidratación correcta es importante, así como beber al menos litro y medio al día de agua. El líquido ayuda a regular y limpiar tu organismo.
Comer mayor cantidad de frutas y verduras
En una dieta equilibrada aumenta el consumo de productos de origen vegetal, que aportan vitaminas, minerales, fibra y agua.
Reducir el consumo de bollería o alcohol
En una dieta equilibrada hay que vigilar el consumo de productos ultra calóricos como la bollería industrial o el alcohol. No es que no se puedan comer, pero con moderación y no como algo habitual.
Sí a proteínas y fibras
Si tu objetivo con una dieta equilibrada es perder peso, deberás aumentar el consumo de proteínas y fibra y reducir el de carbohidratos y grasas. Y por supuesto, evitar los atracones.
Comer sano no significa comer aburrido
Llevar una dieta equilibrada no es sinónimo de hacer una comida aburrida. Puedes preparar todo tipo de recetas sabrosísimas. Para ello mira recetas, así se hará más llevadero y divertido comer sano.
Hacer ejercicio
Aunque sea 20 o 30 minutos para llevar un estilo de vida saludable, además de una dieta equilibrada es importante tener algo de actividad física, más en esta sociedad sedentaria, aunque sea unos minutos al día. Así notarás mejor los efectos de comer bien.
¿Puede un entrenador personal hacernos una dieta equilibrada?
Uno de los grandes debates que surgen cuando tienes un entrenador personal es si debes seguir los consejos de tu entrenador sobre una dieta equilibrada o debes acudir a un especialista como un dietista o nutricionista.
Depende de tus circunstancias personales por lo que no hay respuesta correcta a esta pregunta. Normalmente un buen entrenador personal tiene formación en nutrición y si tu objetivo con una dieta equilibrada es mantenerte saludable, con sus consejos bastará. Si tienes un objetivo más específico como por ejemplo perder 15 quilos en unos meses, ahí sí debes seguir las pautas de un dietista.