Cómo Energy Fitness Professionals protegió su negocio durante la pandemia con Virtuagym

Conociendo a Energy Fitness Professionals

Energy Fitness Professionals (EFP) ha proporcionado gimnasios y centros de fitness corporativos para empresas del Reino Unido desde 1998. Es el proveedor de fitness corporativo más antiguo del país y, durante mucho tiempo, se mantuvo fiel a métodos tradicionales de gestión y contacto con la comunidad. Sin embargo, incluso antes de que comenzara la pandemia, EFP ya miraba hacia el futuro.

Después de años investigando sobre Virtuagym, la empresa decidió que necesitaba un proveedor de software que les ayudara a “gestionar toda la administración, hacer el marketing, pero también contar con un gimnasio en el bolsillo, para que, en lugar de unirse a un gimnasio comercial cercano, los empleados prefieran nuestros gimnasios porque ofrecemos un mejor servicio”, explica el director, Robert Radford.

EFP evitó la congelación de membresías y creó un nuevo embudo de ventas

Contar con una solución de software se ha vuelto más importante que nunca. Antes de la llegada del coronavirus, EFP tenía una única forma clave de captar socios: que las personas entraran físicamente al gimnasio para hablar con el equipo. “No hacíamos realmente listas de correo internas. Teníamos un único embudo claro para nuestros socios, que era a través del equipo del gimnasio, y eso se cerró por completo. Tuvimos que intentar restablecer y crear una nueva base de socios desde cero”. Ahí es donde entró en juego Virtuagym.

EFP aprovechó la función de comunidad de Virtuagym para contactar con sus socios, mantenerse conectado y promocionar sus servicios. “Pudimos lanzar clases en vivo en Facebook gracias a ello. Toda nuestra publicidad pasó por los grupos de comunidad, además de cualquier otro servicio que quisiéramos lanzar digitalmente… fue muy útil contar con un lugar donde poder contactar con todos ellos”.

¿No siempre consigues lo que quieres… o sí?

La búsqueda no fue fácil. “Necesitábamos un software para la programación, para los pagos y que además fuera compatible con nuestro modelo de negocio. Muchos simplemente no podían ofrecerme lo que quería”, explicaron. “Así que volví a buscar y os encontré a vosotros”.

Un sistema de software flexible permitió a EFP ofrecer una marca personalizada para sus clientes

El sistema de créditos de Virtuagym fue uno de los principales puntos de venta. Los entrenadores de FitPro Station pueden comprar créditos y luego usarlos para reservar tiempo en las estaciones de trabajo. Sencillo: compras créditos, reservas una estación. “Lo que me gusta del sistema de créditos es su escalabilidad.

En el futuro, los precios podrían cambiar según la ubicación, la hora del día, y demás. No quiero que los entrenadores tengan que poner su tarjeta de crédito cada vez. Eso es una mala experiencia. Este sistema de créditos, sin embargo, es como una tarjeta de regalo. La compras una vez y la usas cuando quieras."

Una experiencia profesional y sencilla

Cuando buscaron un proveedor de software, era crucial que EFP se asociara con una empresa que entendiera las dificultades únicas del mercado corporativo. “Porque si no has estado en ese mercado, no te das cuenta de lo difícil que es. Decimos que no podemos hacer algo y otra empresa puede no entender que no siempre es nuestra decisión. No es solo datos de socios, es datos de empleados de otra empresa."

La flexibilidad del software de Virtuagym para gimnasios también fue crucial para EFP. Esto permitió a la empresa crear aplicaciones personalizadas y branding para cada uno de los 13 sitios con los que usan el software. “Hasta Virtuagym, no habíamos tenido nada replicado de un sitio a otro.” Desde logotipos hasta esquemas de colores, EFP usó Virtuagym para crear aplicaciones personalizadas para cada uno de sus clientes.

Modelos de entrenamiento híbridos: ¿el futuro de la salud corporativa?

Después de la pandemia, se dice que la combinación de entrenamiento offline y online es el futuro del fitness. EFP reconoce que esto es especialmente cierto para aquellos que trabajan en el ámbito corporativo. “Si alguien está en una oficina cinco días a la semana y podemos ofrecerle la mitad del precio que tendría que pagar en un gimnasio comercial, es bastante fácil para ellos tomar la decisión de unirse al gimnasio corporativo.

Pero si estás dos días a la semana en la oficina y tres en casa, de repente estamos compitiendo con el sector comercial. Así que planeamos ofrecer esa solución híbrida", explica Robert. Usando la solución de coaching y la aplicación móvil de Virtuagym, EFP espera llegar a los socios tanto en casa como en las instalaciones.