El precio de un buen equipamiento de entrenamiento puede ser caro, pero también es necesario para que tus clientes se puedan ejercitar en tu estudio o centro.
Ya sea un banco de pesas, un stepper o una prensa de piernas , este equipo añade valor a su estudio. Pero, ¿necesitas todo este equipo? ¿Los clientes los utilizan?
En esta entrada del blog, analizaremos más de cerca la gran pregunta "¿comprar o alquilar?". Si todavía no estás seguro, siga leyendo.
Cual es la mejor opción, ¿comprar o alquilar?
La decisión de comprar o alquilar equipos de fitness depende de varios factores. Por lo tanto, antes de comprar un nuevo equipo, debes pensar si se ajusta a tu marca y a tu grupo objetivo, cuáles son tus recursos financieros y cómo es el espacio de tu estudio.
En base a estos puntos puedes acercarte a la decisión “comprar o alquilar”.
Tu marca y tu público objetivo
¿Qué impresión quieres transmitir con tu marca y a qué grupo objetivo te diriges?
¿Es un estudio de lujo o un estudio económico? ¿tu público objetivo es mayor y necesitas más el cardio o quizás te diriges a la generación más joven que valora el desarrollo muscular? Dependiendo de a quién te dirijas y de lo que pretendas, deberás elegir tu equipo. Ten siempre en cuenta que este equipo necesita mantenimiento tanto si se utiliza como si no.
Entendemos que es bueno tener tu propio equipo, pero a veces no es la mejor opción. Las tendencias para hacer ejercicio van y vienen, y los equipos de hace unos años pueden ser hoy bloques metálicos anticuados.
Además, pueden requerir más mantenimiento del que merecen, sobre todo si no se utilizan. En consecuencia, si optas por sólo alquilar tu equipo, puedes devolverlo o actualizarlo fácilmente en función de la nueva tendencia del fitness.
Tu presupuesto
¿Cuál es su situación financiera actual, es decir, cuáles son tus inversiones a largo plazo, cómo es tu liquidez, tienes opciones de financiación a través del banco para los costes de adquisición y cuál es el nivel de mantenimiento?
Tener diversos equipos diferentes está muy bien, pero si no puedes pagarlos o no se utilizan, al final no has hecho nada.
Aun así, la forma más barata de tener un equipo es comprarlo. Porque lo que has comprado lo puedes conservar y utilizar todo el tiempo que quieras. No obstante, el equipo también debe recibir un mantenimiento regular, el lema aquí es: cuanto menos complejo y menos piezas móviles, menos posibilidades hay de que tu máquina se rompa.
Además, considera los diferentes costes de la compra, el leasing o el alquiler y haz algunos cálculos para saber qué esperar y poder evaluar mejor tus opciones. Si quieres poder deducir tus pagos mensuales como gasto de explotación, considera la posibilidad de alquilar.
El espacio
¿Tienes espacio suficiente en tu estudio para ampliar el número de equipos diferentes o más bien no?
Si es así, genial. Si no es así, puedes pensar en alquilar diferentes equipos para diferentes eventos, meses, etc.
Dá rienda suelta a tu creatividad. Sin embargo, considera la posibilidad de mantener los equipos más importantes en la gama estándar para mantener un cierto nivel.
En caso de que hayas comprado tu equipo
¿Ha pensado alguna vez en alquilar tu equipo? Esto es especialmente práctico si no lo necesitas en este momento o si lo alquilas a particulares que están empezando su rehabilitación y quieren hacer sus sesiones de entrenamiento en casa por diversos motivos.
Especialmente para las personas o clientes que sólo necesitan el equipo para la rehabilitación, por ejemplo después de una operación de cadera o rodilla, esta oferta es especialmente tentadora.
Esto no sólo proporciona una comodidad adicional a tus clientes, sino que también puede ser una fuente adicional de ingresos para tu negocio.
Como puedes ver, no hay una respuesta correcta o incorrecta a la pregunta “comprar o alquilar”.
Ambas opciones tienen sus pros y sus contras y depende de ti y de tu negocio qué opción es mejor para ti. Esperamos poder ayudarte en tu decisión y hacértela un poco más fácil.
